Hace un tiempo conocí a una persona. Una persona con la que me sentí muy identificado. Tras largas charlas y dias hablando con el, pudo contarme que de chiquito estuvo en la misma etapa y estado en el que estoy yo. Tal vez es por eso, que opino y pienso igual que el. Aunque muchas veces, me cuesta expresarme o escribir lo que pienso o siento. Hace ya unos dias o semanas, ya ni me acuerdo, el publico en su blog esta carta, una carta con la que me sentí muy identificado y con la que me ayudo a pensar y reflexionar un montón.
Al terminar de leerla, opine que eso era lo que necesitaba, un tiempo. Un tiempo para mi. Para crecer, para ser yo mismo, para dejar de sufrir por amor.
Lee con atención, esta es mi nueva decisión:
Me dí cuenta, que lo único que se puede acabar en uno, es la vida. Por que nada existe, nada es real, nada es para siempre y sobre todo, es subjetivo. No existe el depender de alguien, por que no hay nadie de quien depender. Lo único que se vale de uno, es uno mismo. Y aunque suene egoísta, es la maldita verdad.Me siento más inútil de lo que nunca me sentí, siento que todos los esfuerzos que he hecho a lo largo de todo, han sido en vano. Me sentía dormido, y esperaba despertar por fin en cuando me tocara vivir la vida. Pero nunca me dí cuenta de que no iba a despertar cuando yo quisiera, y que me podrían despertar de un golpe.Puedo llegar a comparar estar pérdida, como una muerte, aunque nadie perdió la vida...sí, quizás sí se murió alguien... Juan Cruz el estúpido, el que tenía esperanzas, sí, tal vez ese se murió.Lentamente, creo que voy cerrandolé las puertas al mundo, y creo que nunca en mi vida me he sentido más satisfecho de lo que hago. De verdad hay personas buenas, pero creo que ninguna es más confiable para mí mismo, que yo. Después de todo, los amigos van y vienen como las estaciones y los amores, pasan como los días. Pero yo...yo siempre voy a estar acá, yo soy quien se castiga, quien se reprocha, quien se premia. Y es que no voy a dejar que nadie más me toque. Por que, resolví, que nadie se merece nada de lo que uno puede dar. NADIE. Excepto claro, uno mismo.Esta deuda es mía, para conmigo, y quizás, voy a empezar a darle importancia a la persona a la que menos valor le he dado en 15 años: Yo.Definitivamente me voy a alejar de esto por un tiempo. Quizás hasta que me de cuenta, que estoy preparado para enfrentarme a los demás. Quizás ya no me interesa mostrarle al mundo lo que siento o lo que pienso. Por que realmente, no me interesa lo que piensan o sientan ustedes. Me despido, quien sabe por cuanto tiempo. Tengo cosas mejores que hacer que estar en esta silla, voy a salir a vivir.
Gracias Mauro, gracias mejor amigo.